La mañana del 5 de junio, el complejo arqueológico de Saqsaywaman amaneció cerrado al público debido a un plantón de trabajadores de la Dirección Desconcentrada de Cultura del Cusco. Unos 400 empleados del Ministerio de Cultura iniciaron un paro de 24 horas para exigir la homologación de sueldos, mejores condiciones económicas y el respeto a sus derechos laborales bajo el régimen CAS.
La medida, pacífica pero contundente, dejó a decenas de turistas sin acceso al emblemático sitio inca, provocando largas filas y malestar entre los visitantes. El cierre impactó también a guías, artesanos y emprendedores locales que dependen del turismo en la zona.
Con pancartas que exigían “trabajo digno” y “homologación salarial”, los manifestantes advierten que la protesta responde a un reclamo nacional ante la precariedad de miles de trabajadores del sector Cultura. Saqsaywaman, que recibe más de 800 mil turistas al año, representa un pilar clave para el turismo y la economía de Cusco.