En un hecho sin precedentes para la Iglesia Católica, Robert Francis Prevost Martínez —religioso con nacionalidad peruana y estadounidense— fue elegido como el Papa número 267 , adoptando el nombre de León XIV . Prevost, quien hasta enero se desempeñó como prefecto de la Congregación de Obispos (nombrado por el Papa Francisco), tiene una profunda conexión con Perú: llegó al país en 1985 como misionero agustino y sirvió en Chiclayo, Trujillo, Chulucanas y Callao .
La RENIEC confirmó que Prevost obtuvo su DNI peruano en 2015 , reforzando su vínculo con el país. Nacido en Chicago de ascendencia franco-italiana y española , su trayectoria destaca por su visión global y servicio pastoral en América Latina. Su elección marca un hito para Perú, que por primera vez ve a un ciudadano con doble nacionalidad ascender al máximo cargo de la Iglesia Católica.
León XIV asume en un contexto de desafíos para la Iglesia, con expectativas de continuar el legado reformista de Francisco. Su conocimiento de realidades multiculturales —desde EE.UU. hasta las comunidades rurales peruanas—podría definir un pontificado con enfoque en la inclusión y la justicia social .